No hace falta levitar, no hace falta descargarse aplicaciones, no hacen falta lámparas de colores en forma de algo parecido a un ente sentado, no hace falta quemar incienso delante de una cabeza de Buda, no hace falta un zafu de semillas naturales a juego con un zafutón… ¡Cómo nos gusta complicarnos la vida! En este post voy a desmontar algunos de los mitos más extendidos sobre la meditación, para dejar claro que es algo serio y no una moda pasajera, y para demostrar que solo necesitas una cosa para disfrutar unos minutos al día de ‘tu momento’: a ti mismo.
LA MEDITACIÓN NO TIENE NADA QUE VER CON LA RELIGIÓN, EL YOGA O HACERSE HIPPY. SE TRATA DE PRESIONAR EL BOTÓN DE «PAUSA» UNOS MINUTOS AL DÍA
¿Eres de los que cree que solo los yoguis practican meditación? ¿O solo los monjes budistas? Se sientan con las piernas cruzadas sobre cojines y pasan horas recitando mantras… ¡Pues no! Es cierto que el yoga es un tipo de meditación en movimiento en la que la atención se centra en la unión movimiento-respiración; es cierto que es habitual que los yoguis practiquen meditación como complemento a su práctica; es cierto que los monjes budistas meditan; pero la meditación no es algo exclusivo del ámbito religioso o del mundo del yoga. Ellen DeGeneres lo resume perfectamente cuando lo compara con arreglar su ordenador. «A veces, cuando se vuelve loco, solo tengo que apagarlo y, cuando lo vuelvo a encender, vuelve a funcionar», dice. «Eso es lo que la meditación es para mi».
LA MEDITACIÓN NO ES DEJAR LA MENTE EN BLANCO
Quien diga algo así es que sencillamente no tiene ni idea de qué es la meditación ni la ha practicado en su vida. Dejar la mente en blanco es humanamente imposible. En palabras de Pablo D’Ors, «la meditación no es reflexión, es hacer silencio interior». La mente está diseñada para estar en funcionamiento todo el rato, el trabajo de la mente es pensar, y el problema es que con el ritmo de vida que llevamos – híper conectados y recibiendo información constantemente de varias fuentes a la vez – nuestra mente funciona como una centrifugadora, está constantemente agitada y va saltando de un tema a otro sin centrarse en nada. Es lo que se llama Monkey Mind, puedes leer más en este post. Por eso, la meditación consiste en centrar la atención en una sola cosa, y volver a esa cosa cada vez que nuestra mente se va por los cerros de Úbeda. Cuando uno empieza a meditar lo habitual es comenzar con pranayama, una técnica de respiración que consiste en contar inhalación/exhalación sin controlarlas ni forzarlas, simplemente contarlas. Otras técnicas de meditación son los mandalas para colorear, meditación en movimiento, meditación sobre pensamientos concretos, etc. Pero para empezar, sencillamente respira. Un ejercicio sencillísimo para principiantes es contar respiraciones (inhalación+exhalación= 1 respiración) hasta llegar a 15, y luego contar a la inversa hasta llegar a 0. Cada vez que llegue un pensamiento y te distraiga de tu cuenta, simplemente déjalo ir y sigue contando. Si has perdido la cuenta, no pasa nada, empieza otra vez a contar. Hazlo durante 10 minutos. Te explico paso a paso este ejercicio al final de este post.
NO TIENES QUE SER SÚPER FLEXIBLE NI PASAR HORAS A OSCURAS EN LA POSICIÓN DEL LOTO
Solo tienes que sentarte y relajarte. No se trata de estar tan sumamente cómodo que te quedes dormido con la segunda respiración, pero tampoco es un castigo. Sentarte en el borde de la silla con las piernas en ángulo recto, la espalda recta y las manos sobre las rodillas es una postura ideal. Si sentarte en la posición del loto te resulta cómodo, genial, pero no es imprescindible. Una vez que estés en ‘tu’ postura de meditación, concéntrate en tu respiración, siente cómo el aire baja y entra en tus pulmones, y cómo sale de tu cuerpo mediante la exhalación… y olvídate de todo lo demás. Enhorabuena, ya estás meditando.
ES NORMAL QUE TU CABEZA ESTÉ A TODO MENOS A LA RESPIRACIÓN
No pienses que lo estás haciendo mal si tu mente está activa. Con la práctica irás consiguiendo calmar la mente para que el torbellino de pensamientos vaya desapareciendo. ¿Y cuándo será eso? Pues da igual, deja de preocuparte por eso. La meditación no es un concurso a ver quién cuenta más sin distraerse. No importa. No hay realmente una manera «correcta» o «incorrecta» de meditar. Habrá días en que tu mente esté en modo Zen, y otros en que no pases de 2. En cualquier caso obtendrás todos los beneficios de la meditación. De nuevo citando a Pablo D’Ors, «el objetivo no es el control absoluto de la mente, sino la absoluta aceptación de lo que la mente es«.
NO TIENES QUE HACERLO DURANTE HORAS
Todo lo que necesita es cinco o diez minutos por día. Eso es todo. Como decíamos al principio no necesitas accesorios, ni necesitas empezar a practicar yoga (aunque te lo recomiendo) ni te tienes que pasar horas sentado en una montaña como un monje y sobrevivir a base de bayas. Solo tienes que tratar de ser más «tú». Hazlo durante una semana y sentirás los beneficios. Aumenta el tiempo gradualmente: tres minutos, cinco, diez, quince. Ve a tu propio ritmo. Y recuerda: comienza poco a poco.
NO TE RINDAS
De verdad, no lo dejes. Yo misma muchos días me paso los 15 minutos que dedico a meditar repitiéndome lo absurdo de estar ahí sentada en lugar de estar 15 minutos más en la cama. Pero te aseguro que los días ‘de sentada’, pase lo que pase durante esa meditación, son mejores días, porque los afronto con la mente serena y clara, lista para estar atenta y presente. A medida que mejoras en la meditación, te encuentras más en sintonía con tu ser interior y, a medida que crece la conciencia general, estás más en sintonía con los demás.
Todos nos estresamos y la meditación no evita que te estrelles, pero ayuda a poner las cosas en perspectiva. Tampoco evita que tengas mil cosas que hacer, pero si ayuda a entender que todas esas cosas urgentes tal vez no lo son tanto.
«No hay aventura mayor que la de entrar en uno mismo», Pablo D’Ors
Nos vemos muy pronto por aquí, mientras puedes encontrarme en Instagram como @janafr o en mi mail jana@janafernandez.es.
¡Mil besos!
Jana
NOTA DE LA AUTORA: si quieres compartir este post ¡genial!, pero por favor, si utilizar parte o todo el contenido de este post en otro site/blog/RRSS, acuérdate de mencionarme ? ¡Gracias!